¡Bienvenidos a este nuevo curso escolar!

Gracias por vuestra confianza y por ese Nº 1 en ventas de hoy, en Educación, Orientación y en Psicología, de Amazon España y México.

.

Cuando escribí Inteligencia natural (Toromítico, 2013) lo hice desde la necesidad urgente de transmitir un mensaje: “Importa más educar en la felicidad que en el conocimiento”. ¡Llevar ese mensaje a las familias, a los profesores, a la sociedad es tan importante…! Lo que no podía imaginar es la acogida que ha tenido, cómo ha corrido por las redes, por las estanterías, por los platós… Hoy sé que somos muchos en este empeño de explicar la importancia del ser humano en su individualidad, en apostar por otros sistemas inspirados en lo que hoy sabemos sobre el cerebro y el niño, en sustituir el látigo por la sonrisa, la reprimenda por el acompañamiento, el grito por la reflexión, y la competitividad por la complementariedad. Cada vez somos más los que pedimos a nuestros niños que se atrevan a equivocarse porque errar no supone sino la puerta del aprendizaje, que no pasa nada, que cuando pasa es cuando pierdes la ilusión por metas soñadas, que todos necesitamos forjar nuestros sueños, que es normal sentirse mal de vez en cuando pero que, al final, siempre vence la sonrisa.

Gracias a todos los que me habéis apoyado, me habéis acompañado, me habéis enviado vuestros saludos y vuestro ánimo. También gracias a quienes habéis compartido conmigo vuestras inquietudes Es importante compartir para que este empeño de transformación llegue lo más lejos posible en nuestra sociedad, para que unos y otros no nos sintamos solos en este empeño. Pero recordad que “todos debemos escribir en minúsculas”, concentrarnos en lo que podemos hacer cada día y empezar por vestirnos con una sonrisa frente al espejo, con nuestro cónyuge, nuestros hijos, nuestros vecinos, nuestros compañeros o nuestros alumnos.

Por mi parte, os aseguro que seguiré prestando mi voz a este mensaje allí donde me queráis llevar. Un fuerte abrazo.

#JoseCarlosAranda #Inteligencianatural